Isa y Reuben se mudan juntos. Su relación se profundiza, pero aparecen los primeros signos de cansancio. Entonces Isa conoce lo que parece ser la pareja perfecta y Rubén puede conseguir un trabajo muy atractivo.
El prestigioso guardaespaldas Michael Bryce recibe un nuevo cliente: un asesino a sueldo, Darius Kincaid, que debe testificar en un juicio en La Haya contra un cruel dictador.