Un convicto moribundo (Brian Cox) es excarcelado e intenta retomar la relación con su hija (Kate Beckinsale) y el nieto al que nunca conoció, pero su violento pasado vuelve para perseguirlos a todos.
Una adolescente inicia un viaje de autodescubrimiento y supervivencia como parte de un convoy de una banda de punk, a través de Estados Unidos en los años 80.